Cirrosis hepática : enfoques naturales

Tao L | 28 enero 2024
Tiempo de lectura : aproximadamente 5 minutos
Cirrosis hepática :  enfoques naturales
Indice

    La cirrosis hepática es una enfermedad grave que se desarrolla cuando el hígado sufre daños graves que provocan cicatrices y alteraciones de su estructura normal. Esto puede provocar problemas en la función hepática, como trastornos de la coagulación de la sangre, acumulación de líquido en el abdomen (ascitis) y trastornos hormonales. La cirrosis puede estar causada por un consumo excesivo de alcohol, una infección crónica por el virus de la hepatitis, una enfermedad hepática hereditaria o la exposición a determinados fármacos o sustancias tóxicas.

    ¿ Cuáles son los síntomas de la cirrosis ?

    Los síntomas de la cirrosis hepática pueden incluir fatiga crónica, dolor abdominal, pérdida de peso, pérdida de apetito, náuseas y vómitos, erupción cutáneanáuseas y vómitos, piel y ojos amarillos (ictericia), heces pálidas y orina oscura, facilidad para sangrar o hacerse moratones, erupciones cutáneas y cambios de comportamiento. En las fases avanzadas de la enfermedad, las personas con cirrosis pueden desarrollar insuficiencia hepática, encefalopatía hepática (trastorno neurológico causado por la acumulación de toxinas en la sangre) y cáncer de hígado.

    Plantas medicinales para proteger el hígado

    Es importante señalar que las plantas no pueden curar la cirrosis hepática y no deben utilizarse como sustituto de un tratamiento médico adecuado. Sin embargo, algunas plantas pueden aliviar los síntomas de la cirrosis y ayudar al hígado. Por ejemplo, la alcachofa, el rábano negro y el romero se consideran plantas hepatoprotectoras que pueden ayudar a proteger el hígado de los daños causados por las toxinas. El cardo mariano, la manzanilla y el hinojo también se consideran plantas beneficiosas para las personas con cirrosis. No obstante, es importante consultar con un profesional sanitario antes de tomar cualquier hierba o suplemento para tratar la cirrosis hepática.

    ¿ Qué aceites esenciales debo utilizar ?

    Es importante tener en cuenta que los aceites esenciales no pueden curar la cirrosis hepática y no deben utilizarse como sustitutos de un tratamiento médico adecuado. Sin embargo, algunos aceites esenciales pueden utilizarse para aliviar los síntomas de la cirrosis y ayudar al hígado. Por ejemplo, el aceite esencial de romero se considera hepatoprotector y puede ayudar a proteger el hígado de los daños causados por las toxinas. El aceite esencial de menta puede ayudar a aliviar las náuseas y los vómitos, mientras que el aceite esencial de lavanda puede ayudar a aliviar el estrés y la ansiedad. Sin embargo, es importante consultar con un profesional sanitario antes de utilizar aceites esenciales para tratar la cirrosis hepática.

    El remedio homeopático

    Es importante señalar que la homeopatía no puede curar la cirrosis hepática y no debe utilizarse como sustituto de un tratamiento médico adecuado. Sin embargo, algunos remedios homeopáticos pueden utilizarse para aliviar los síntomas de la cirrosis y ayudar al hígado. Por ejemplo, el remedio homeopático Nux vomica se utiliza a menudo para aliviar las náuseas, los vómitos y la indigestión, mientras que el remedio homeopático Lycopodium puede ser beneficioso para las personas con trastornos digestivos. El remedio homeopático Calcarea carbonica también puede ser útil para las personas con cirrosis hepática, en particular las que tienen problemas de hígado relacionados con una mala alimentación y un consumo excesivo de alcohol. Sin embargo, es importante consultar con un profesional sanitario antes de utilizar remedios homeopáticos para tratar la cirrosis hepática.

    Reglas para mantener una buena salud

    Hay una serie de reglas dietéticas que pueden ayudar a las personas con cirrosis hepática a mantener una buena salud y evitar que la enfermedad empeore. He aquí algunos ejemplos de estas reglas :

    • Evitar el alcohol : el consumo excesivo de alcohol es una de las principales causas de la cirrosis hepática, por lo que es importante evitar el consumo de alcohol para prevenir el avance de la enfermedad.

    • Seguir una dieta equilibrada : es importante seguir una dieta sana y equilibrada para mantener una buena salud general y ayudar al hígado. Esto significa comer una variedad de alimentos ricos en nutrientes, como verduras, fruta, cereales integrales, proteínas magras y grasas saludables. También es importante limitar el consumo de azúcar y sal.

    • Beba suficiente agua : es importante beber suficiente agua para evitar la deshidratación, sobre todo si tiene deposiciones o vómitos frecuentes.

    • Evite ciertos medicamentos : algunas personas con cirrosis hepática pueden ser sensibles a ciertos medicamentos, por lo que es importante que consulte con su médico qué medicamentos está tomando y si alguno de ellos podría ser perjudicial para su hígado.

    • Actividad física regular : el ejercicio regular puede ayudar a mantener una buena salud general y a fortalecer los músculos, incluido el hígado. Sin embargo, es importante no hacer demasiado ejercicio y hablar con el médico antes de iniciar un nuevo programa de ejercicio.

    Publicado el 28 enero 2024 a las 09:42
    Actualizado en 28 enero 2024 a 12:00

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    Tao L

    Tao L

    Editor web

    Me llamo Tao y me apasiona la medicina complementaria. En mi país me formé en medicina tradicional china. Me gusta transmitir los conocimientos adquiridos con mi experiencia. Vivo la mitad del año en Madrid, España.